Carroza, María Begoña.Burgos Medina, YoselinGonzález Ibáñez, Rodrigo.Instituto de Salud Pública.2025-04-102025-04-102024https://repositorio.unab.cl/handle/ria/64116Proyecto de Título (MBA con Especialización en Salud Innovado)En los entornos empresariales, los estudios de postgrado gerenciales y de liderazgo se han transformado en una estrategia fundamental para los profesionales que buscan avanzar en sus carreras y roles de liderazgo. Sin embargo, se plantea una cuestión fundamental ¿Se benefician de manera equitativa hombres y mujeres de las oportunidades brindadas por los programas de estudios gerenciales, de liderazgo y gestión en salud? Esta investigación inicial se embarca en la misión de elucidar esta duda central: ¿Cómo influyen las brechas de género en la participación, progresión y resultados de los graduados/as en roles de liderazgo, jefaturas y gestión en el ámbito de la salud?, ¿qué herramientas y estrategias se pueden desarrollar en los programas de estudios gerenciales, de liderazgo y gestión en salud para abordar las brechas de género que se manifiestan en el ámbito laboral? El análisis tiene un doble propósito: primero, comprender en profundidad cómo las brechas de género impactan la ocupación de estos roles en el ámbito laboral; y segundo, desarrollar herramientas y estrategias que los programas de educación en gerencia, liderazgo y gestión en salud puedan implementar para la mitigación de estas. A nivel mundial, las mujeres ocupan solo el 28% de los cargos directivos y de jefatura, a pesar de representar casi el 40% de la fuerza laboral total. Esta subrepresentación se asocia con barreras estructurales y culturales que limitan el acceso de las mujeres a estos roles, lo que perpetúa las brechas salariales y refuerza los estereotipos de género en el lugar de trabajo. A nivel global, esta situación es particularmente marcada en sectores tradicionalmente dominados por hombres, como la tecnología y la ingeniería, donde la participación femenina en roles de liderazgo es aún menor (1). Las mujeres en todo el mundo ganan, en promedio, un 20% menos que los hombres por el mismo trabajo. Esta disparidad es aún más pronunciada en los niveles jerárquicos más altos, donde las diferencias salariales pueden superar el 25% en algunos países de la OCDE. Las brechas salariales reflejan no solo la discriminación directa, sino también la infravaloración del trabajo significativamente realizada por mujeres, que se acentuada por la segregación ocupacional horizontal y vertical (2) En América Latina y el Caribe, el sector salud está altamente feminizado, con mujeres representando más del 70% de los trabajadores en estas áreas. Sin embargo, la mayoría de ellas se encuentran en posiciones de menor poder y remuneración, como enfermería y atención primaria, mientras que los roles de toma de decisiones y administración están predominantemente ocupados por hombres. Esto contribuye a la perpetuación del "piso pegajoso", donde las mujeres están atrapadas en posiciones con pocas oportunidades de ascenso (3). En la región, el "piso pegajoso" y el "techo de cristal" son fenómenos persistentes. El "piso pegajoso" se refiere a la concentración de mujeres en roles de bajo estatus y baja remuneración, mientras que el "techo de cristal" hace referencia a las barreras invisibles que impiden su avance a posiciones de liderazgo. A pesar de que las mujeres en América Latina y el Caribe tienen niveles educativos comparables o superiores a los hombres, la probabilidad de ascender a puestos de alta dirección sigue siendo significativamente menor, con una representación femenina en estos cargos que no supera el 20% en promedio (4). En Chile, a pesar de que las mujeres han alcanzado niveles educativos similares o superiores a los hombres, las brechas en términos de ocupación de cargos directivos y en jefaturas persisten. Las mujeres en Chile ocupan solo el 24% de los puestos de alta dirección, y la brecha salarial en estos roles es de aproximadamente un 27%, a pesar de tener funciones y responsabilidades equivalentes (5). La combinación de brechas salariales, segregación ocupacional, y obstáculos en el ascenso a roles de liderazgo incrementa la vulnerabilidad económica de las mujeres en Chile. Además, las mujeres enfrentan una doble carga al combinar el trabajo remunerado con el no remunerado (cuidado del hogar), lo que limita su disponibilidad para asumir roles de mayor responsabilidad y contribuir a la perpetuación de estas brechas (6). La importancia de promover la equidad de género en estos roles laborales trasciende el ámbito académico, debido a que las brechas de género afectan no solo las trayectorias profesionales de las mujeres, sino también la toma de decisiones y el desempeño organizacional. La fuerza laboral equitativa y diversificada es reconocida como un factor clave para la innovación y el éxito de las organizaciones (1,6,7).esIgualdad de GéneroIgualdad de Oportunidades de EmpleoAdministración de Servicios de SaludLiderazgo en MujeresInvestigacionesChile.Rompiendo el techo de cristal en el ámbito laboral : propuestas estratégicas e instrumento de medición de brechas de género en egresados/as de programas postgrados enfocados en dirección, liderazgo y gestión en saludTesis