Giaconi Carvajal, Gisela SoniaPimentel Melo, Carolina Angélica.Muñoz Encinas, Lily Paula.Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales.Escuela de Periodismo.2021-03-172021-03-172003http://repositorio.unab.cl/xmlui/handle/ria/18245Tesis (Periodismo)Tesis con detalles en la digitalizacion pero no afecta su contenido.Alfredo Espinoza, saxofonista alto, soprano y clarinetista, fue escuchado por primera vez en Europa en la década del · 70. andaba de gira, junto a la legendaria agrupación bonaerense Porteña Jazz Band. En dicha oportunidad, versados en la materia se mostraron profundamente sorprendidos por la altura musical y cultural jazzística del joven saxo alto. Después de 30 años en el extranjero, y tras muchos triunfos en distintas ciudades de Europa, retomó a su Valparaíso natal para estar junto a su madre, pero esta vez, afectado por un fuerte trastorno de personalidad -según nos aclara Gladys Espinoza, su hermana-, que lo llevó a despreocuparse de su persona y, más tarde, a alejarse de la sociedad y de la música por largo tiempo. Alfredo nació el 28 de diciembre de 1942. A los 7 años emigró junto a su familia a Argentina, donde iniciarla, una década más tarde, sus estudios de teoría y saxofón. En 1961 comenzó a tocar música Jazz junto a sobresalientes grupos trasandinos, como Kansas Cfty Stompers y Antigua Jazz Bond, entre otros. Se integró a Porteña Jazz Band en 1965, considerada por la crítica europea como la mejor orquesta de Jazz a escala mundial dentro del estilo New Orleans. Continuó con esta agrupación su proceso de aprendizaje, alcanzando un notable dominio del lenguaje y de las técnicas del Jazz tradicional, y realizando exitosas giras con colectivos propios, o en la categoría de sideman. El Tour de Francia en 1970 es, hasta hoy, uno de sus recuerdos más preciados. Ya algo enfermo, para algunos, continuó viaje a España y tocó en el festival de Tarrasa, desde donde prosiguió a Ibiza para retomar finalmente a Buenos Aires, ciudad en la que nace su único hijo, Gabriel. Uega a Chile en 1980, algo cansado de la intensidad de sensaciones y emociones experimentadas en el viejo continente y que Buenos Aires no pudo apaciguar. Deja en el camino a su única compañera conocida y a su pequeño hijo, quien crece lejos de su música, en Estados Unidos. Casualmente, hace contacto con músicos de la V Región, el Quinteto de Jazz Moderno de la Escuela de Arte de la Universidad de Valparaíso, más conocido como UV5, generando una actividad dentro y fuera de la Escuela destinada a la creación y la difusión del Jazz. Paralelamente, empieza a frecuentar el Club de Jazz de Santiago y se Integra por primera vez a Retaguardia Jazz Band, la agrupación estilo tradicional de mayor antigüedad en el medio local. Junto a ellos, participa activamente durante 5 años en grabaciones y giras nacionales e internacionales, incluyendo la única visita del grupo a Nueva Orleans.JazzChile.HistoriaJazz en los círculos del sur