Inostroza Palma, ManuelEspinaza Ortíz, María CeciliaInstituto de Salud Pública2025-04-082025-04-082023https://repositorio.unab.cl/handle/ria/64032Proyecto de título (MBA con especialización en Salud)A 8 años de su creación y por la importancia de la Ley Ricarte Soto (LRS) en la protección financiera de Tratamientos de Alto Costo (TAC) en Chile, era coherente plantearse cuál había sido su impacto en el Sistema de Salud y considerando lo planteado, proyectar su futuro presupuestario el cual quedó enmarcado en un escenario de incertidumbre sin la incorporación de nuevas patologías ni tecnologías sanitarias (TS) desde el año 2021. Por otra parte, en el contexto del objetivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de caminar hacia una cobertura sanitaria universal y además, considerar la recomendación de introducir Evaluación de Tecnologías en Salud (ETESA) en las decisiones de Salud pública; se ubica a Chile temporalmente en el año 2023 con un Sistema altamente fragmentado y segmentado, con problemáticas profundas tanto del sector privado como público. Donde, las diferentes propuestas de reformas al Sistema a lo largo de los años han concordado ente otros puntos, en que el avance en términos de acceso debiesen ser a través de la creación de un Plan de Salud Universal (PSU) y por otra parte, si bien se realiza ETESA en Chile, se ha planteado la necesidad de contar con un organismo autónomo. De esta manera, los objetivos del presente trabajo se basaron en determinar el alcance de la LRS en el Sistema de Salud y proyectar su financiamiento en un escenario hipotético que involucre una eventual creación de un PSU y una institucionalidad ETESA. Para ello, se eligió un proyecto de reforma que fuese reciente y que se relacionara con los elementos en discusión eligiéndose; el proyecto de ley de Reforma al Fondo Nacional de Salud (FONASA) y creación de un PSU del año 2020 y que actualmente se encuentra en el congreso. Además, la contingencia actual (2023) centrada las problemáticas y posibles quiebras de las ISAPREs, ha representado una eventual crisis del cómo abordar las consecuencias para el Sistema, incluyendo a la LRS que también se vería afectada. Crisis que podría representar un retraso o un gatillante que acelere una reforma. MATERIAL Y MÉTODOS: Se realizó un análisis descriptivo de la LRS durante sus años de ejecución (2015 al 2023), de la situación actual del Sistema de Salud en el año 2023, del proyecto de reforma elegido y del desarrollo de la ETESA en Chile. Para ello, se realizó una búsqueda bibliográfica de diversas fuentes de datos relevantes, como revistas especializadas, informes y estadísticas de las instituciones sanitarias y los documentos oficiales de los proyectos de ley, además del marco legal oficial de la propia LRS. Complementariamente, se efectuaron entrevistas de tipo semiestructuradas a diferentes expertos en las temáticas de interés del estudio de modo de construir una visión proyectada de posibles escenarios con base sólida para la investigación. PRINCIPALES RESULTADOS: Al año 2023, mediante 4 decretos ascienden a 27 las patologías cubiertas por la LRS, de las cuales sólo 14 son Enfermedades Raras (ER), dando cobertura a cerca de 50.000 pacientes predominantemente afiliadas al FONASA (76,7 %) de sexo femenino (65,1%) y de rango etario mayoritariamente de 0-9 años (32,1%). Donde, las 3 patologías con mayor número de beneficiarios corresponden a: Profilaxis infección del Virus respiratorio Sincicial (VRS) (27,7%), Artritis Reumatoide (AR) refractaria (18,7%) y cáncer de mama gen HER2+ (16,2%). Estas 2 últimas coincidentes en ser las de mayor gasto del presupuesto del Fondo de tratamientos de alto costo (FDTAC) 2022 y ambas tener coberturas específicas también en la Ley de Garantías Explícitas en Salud (GES). Financieramente el FDTAC hasta 2022 rentó positivamente, pero la holgura financiera proyectada a 10 años por la Dirección de Presupuestos del Gobierno de Chile (DIPRES) cambia abruptamente de un informe a otro (2019 v/s 2021) indicando este último informe quealcanzaría valores negativos desde 2028. La inclusión de biosimilares en la LRS ha impactado en la reducción de precios de TS innovadoras en forma diferencial (30%), mientras que el impacto en los valores de los propios biosimilares es escalada con la aparición de nuevos biosimilares (hasta 84% más económico que el innovador). Los reintegros por cobertura CAEC desde las ISAPRES desde 2016 efectivos, han sido sólo alrededor de un 17%. PRINCIPALES DISCUSIONES: En este trabajo se discuten en profundidad medidas para solucionar el problema financiero de la ley en el presente y a futuro. A) Medidas que implican modificación al marco de la ley: Traspaso de patologías a otros programas o leyes de cobertura. Aumento del presupuesto del FDTAC y cambiar su modalidad a variable y creciente en el tiempo. Autonomía y fortalecimiento para ETESA. Regulación de conflictosde intereses. B) Medidas que no afectan el marco legal: Fortalecer a CENABASTen estrategias de negociación innovadoras.Fortalecer la relación con la industria farmacéutica y el mercado global. Fortalecer al Instituto de Salud Pública (ISP) en farmacovigilancia, fiscalización y políticas de biosimilitud. Revisión de indicadores de monitorización. Cambio en el tiempo de proyección financiera de la DIPRES. Fiscalización de reintegros CAEC. Fomentar las donaciones, entre otros. PRINCIPALES CONCLUSIONES: La LRS ha generado un enorme impacto en el Sistema de Salud de Chile impulsado por su marco legal pionero, provocando grandes desafíos y avances; da una respuesta concreta a una demanda social de los TAC que no tenían cobertura. Surge de la demanda ciudadana y permite su participación por primera vez en Chile en procesos deliberativos, instaurando su presencia como un imperativo ético y desafiando su replicación y perfeccionamiento. Logra avanzar en grandes desafíos como el gasto de bolsillo y regulación de precios. Revela la necesidad de abordar las ER en forma integral. Demuestra que es posible avanzar en universalidad. Introduce un procedimiento de ETESA sin especificarlo para decidir cómo incluir las TS, pavimentando su desarrollo y elevando la necesidad de una agencia autónoma. Las complejas TS que cubre desafían actualmente al Sistema a avanzar en la implementación de los acuerdos de riesgo compartido (ARC), y el fortalecimiento de políticas de farmacovigilancia, registro e intercambiabilidad de biosimilares a nivel local. Su principal barrera y limitación corresponde a tener un insuficiente FDTAC finito y sin crecimiento en su marco legal, no concordante con la escalada de costos en Salud, ni menos con el tipo de TS a las cuales da cobertura. Provocando un marco legal pionero que carece de herramientas (recursos) para llevar a cabo tal desafío de innovación. Su mayor alcance actualmente se centra en dar cobertura a lo que por costo no es financiado por GES principalmente en 2 patologías (AR y cáncer de mama) y un tratamiento de alta demanda (Palivizumab) que en la actualidad, la mayoría de los países lo maneja dentro del arsenal farmacoterapéutico oficialmente incluido en los Sistemas de Salud. En este sentido, es necesario que junto a la actualización hacia un sistema creciente en recursos también se actualice su función dentro de la planificación sanitaria. En un futuro proyectado donde hipotéticamente se avance hacia la creación de un PSU para toda la población, que representa una oportunidad de terminar con la alta segmentación y multiplicidad de planes, se plantean 2 escenarios posibles para la LRS. El primero involucra una articulación funcional y financiera con el PSU de modo de abordar los TAC de forma especializada. El segundo implica la creación de un PSU amplio que contemple todas las coberturas actuales, extrayendo lo mejor de cada una para crear un único marco legal y donde los recursos se centralicen para organizar el presupuesto, la priorización y las estrategias de compra. Dicho escenario implicaría una derogación de la Ley. Ambos escenarios deberían anclarse a una ETESA autónoma y fortalecida para dar legitimidad a lo que tendrá acceso la población. Desprendiéndose, que su necesidad es independiente del tipo de escenario que se genere, del Chile de hoy o el de mañana y su fortalecimiento representará una gran oportunidad de hacerla más participativa permitiendo un seguimiento transparente con retroalimentación y rendición de cuentas de las decisiones sanitarias, hoy casi inexistentes. Finalmente, puede concluirse que la proyección financiera de la LRS en el Sistema de Salud de Chile depende de 3 factores. Primero: de la imperante inyección de recursos crecientes en el tiempo consistente con la exigencia de ir incorporando nuevas TS y esencial para asegurar su sustentabilidad en el tiempo. Segundo: de las reformas que experimente el Sistema de Salud que permitan en mayor o menor medida una articulación eficiente o derogación. Tercero: dependiendo del punto 2, de la implementación de diversas estrategias que le permitan optimizar el presupuesto disponible en el FDTAC. Donde, en un hipotético escenario ideal para la LRS con un imperante presupuesto creciente, articulada eficientemente a un PSU, con una ETESA autónoma y fortalecida, junto a las medidas propuestas en este trabajo para mejorar su optimización, la LRS se visualiza como una herramienta aún más potente y necesaria que seguirá siendo pionera en la propuesta y en la implementación del acceso a medicamentos de alto costo para Chile, cuyo mercado global desafiante y de crecimiento acelerado requiere.esChile. Ley no. 20.850Enfermedad CatastróficaSaludAspectos EconómicosChileLey Ricarte Soto : impacto en el sistema de salud de Chile y su proyección presupuestariaTesis