Examinando por Autor "Morales Bravo, Ximena"

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    La alimentación como socializador del niño en el núcleo familiar
    (Universidad Andrés Bello, 2003) Morales Bravo, Ximena; Wegener Uriarte, Guillermo; Facultad de Arte, Arquitectura, Diseño y Comunicaciones; Facultad de Arquitectura y Diseño
    En el transcurso de la vida el ser humano debe hacer frente a diversas situaciones, en las cuales debe poner a prueba su creatividad, la cual es el arte de percibir los problemas y proponer soluciones. Esta se adquiere a través de las diferentes etapas por las cuales debe pasar. En la búsqueda de hacer un proyecto que sea un aporte para la sociedad, esto quiere decir, que facilite las tareas cotidianas del ser humano, me he preocupado de los problemas o necesidades que lo aquejan, particularmente a él como padre o madre en la protección innata de su hijo. El niño requiere de una atención psicológica, biológica y sociológica para un buen desarrollo integral y con la interacción del niño con el adulto se llevan a cabo todos estos principios. Durante las horas de alimentación del niño, especialmente la hora de almuerzo, se manifiestan problemas que aquejan al adulto y afectan al niño; ya que los horarios, la presentación del alimento, el ambiente físico (mobiliario) y social (familia) y quién lo alimenta, influyen en el comportamiento psicológico del niño que determinan su desarrollo personal. Tomando en cuenta todo lo anterior mi proyecto se basa en mejorar el ambiente físico (se entiende por ambiente físico a todo aquello tangible y observable que rodea a la persona) de un niño al momento de su alimentación y socialización dentro del núcleo familiar, ya que surge la necesidad de integrarlo al grupo para su desarrollo social (comunicación, lenguaje, hábitos, etc.), por lo tanto, debo tomar en cuenta el comportamiento del niño, desde su edad hasta los materiales que van a ser empleados para lograr un objeto que permita al niño incorporarse a su familia durante la alimentación y que por supuesto posea la seguridad necesaria para su protección, ya que el ambiente tanto material como social en el que nace y crece el niño adquiere enorme importancia ya que constituye una fuente de estímulos y experiencias para un buen desarrollo afectivo-social.