Análisis morfo-estructural y estilos de deformación asociada a la subducción a la latitud de Iquique-Pisagua (20°S), Chile
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2019
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Universidad Andrés Bello
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Resumen
El margen convergente del norte de Chile ha sido foco de estudios geofísicos y geológicos, debido a la presencia de una laguna sísmica, ubicada entre el sur de Perú (terremoto de 1868 con Mw=8,8) y el norte de Antofagasta (terremoto de 1877 con Mw=8,8), la cual tuvo su ruptura el 1 de abril del 2014 por el terremoto de Iquique Mw=8,2, el cual fue condicionado por una serie de eventos sísmicos precursores en marzo del mismo año.
El norte de Chile, específicamente a los 24°S, ha sido caracterizado por presentar un estilo de subducción de erosión tectónica con la presencia de un pequeño prisma de acreción, siendo esto algo inusual, debido a que ambos estilos de subducción se forman en condiciones distintas, tanto endógenas (reología y rugosidad de la placa oceánica) como exógenas (aporte sedimentario). Es por esto, que se espera identificar los estilos de deformación y morfo-estructuras asociadas al tipo de subducción presente en el área.
Utilizando la sísmica de reflexión multicanal, el proyecto PICTURES adquirió los datos sísmicos mediante el crucero “R/V Marcus Langseth” a fines del año 2016 entre los 18,5°S y ~21,5°S. Con los datos obtenidos fue posible realizar una sección sísmica entre las latitudes 19,9°S y 20,3°S y longitudes 70,2°W y 71,5°W, para analizar las morfoestructuras de la zona y construir un modelo tectónico-estructural del margen activo chileno.
El análisis de la sección sísmica muestra que las estructuras encontradas se caracterizan principalmente por fallas normales a lo largo del talud continental, evidenciado a su vez estructuras en flor negativa, indicando esfuerzos de cizalle. Se distingue una plataforma continental extensa que supera los 40 km de extensión, diferenciada por la cuenca sedimentaria de Iquique. Al mismo tiempo, se presentan estructuras inversas en el talud inferior, donde se define un incipiente prisma de acreción de 7.5 km de ancho asociado además con una capa sedimentaria (~750 m) que llega hasta la fosa, mientras que hacia el oeste, la placa oceánica está representada por estructuras de tipo horst-graben evidenciados por su morfología y por las fallas normales asociadas, que se distinguen también en la zona de subducción por reflectores fuertes. Además, se observan reflexiones de alta amplitud que pueden corresponder a un monte submarino subducido previamente.
Entonces, a los 20°S se afirma un estilo de subducción dominado erosión, donde las estructuras rugosas de la placa oceánica erosionan la parte basal del talud inferior de la placa Sudamericana, generando acumulación de detritos, que junto a los sedimentos de caída del talud, generan esfuerzos de compresión formando el incipiente prisma de acreción frontal, el cual se distingue por asociación de pliegues y fallas inversas. Finalmente, no se obtiene una relación sismológica-estructural, puesto que no hay una buena resolución en los datos para distinguir la zona sismogénica y es muy alto el rango de errores en las profundidades de los eventos sísmicos obtenidos de la USGS. Por otro lado, el gap sísmico podría estar asociado al estilo de subducción, debido a que la zona en sí corresponde a un segmento de bajo acoplamiento, lo que ralentizaría la propagación de rupturas sísmicas, sin embargo, existen 3 factores que mejoran el acoplamiento entre las placas, aumentando la posibilidad de generación de terremotos: El contacto de la zona de los “horst” de placa oceánica con la placa continental, la cantidad de sedimentos aportados al canal de subducción y la evidencia de montes submarinos subducidos.
Notas
Tesis (Geología)
Palabras clave
Tectónica de Placas, Zonas de Subducción, Chile, Iquique, Pisagua