Estudio acerca de la relación entre la agresividad y/o auto agresividad del niño hemofílico en el vínculo madre-hijo
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Fecha
2010
Autores
Profesor/a Guía
Facultad/escuela
Idioma
es
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Editor
Universidad Andrés Bello
Nombre de Curso
Licencia CC
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Resumen
De acuerdo a la Sociedad Chilena de Hemofilia (2009), la hemofilia es una
enfermedad genética ligada al cromosoma X que se expresa por una disminución de
factor de coagulación VIII para la hemofilia A, o del factor IX para la hemofilia B. Este
factor es una proteína de la sangre que controla las hemorragias y es producida en el
hígado, la severidad de la hemofilia dependerá de la cantidad de factor faltante,
encontrándose hemofilia leve, moderada y severa.
La hemofilia A afecta a uno de cada 5.000-10.000 varones, mientras que la
hemofilia B lo hace en uno de cada 30.000. Así, la hemofilia A representa
aproximadamente un 85% de los casos de hemofilia y la hemofilia B se sitúa en torno
al 15%.
En general la hemofilia se hereda, no puede contraerse ni transmitirse, pero
algunas veces se manifiesta en personas donde no había antecedentes de hemofilia
en la familia. Esta hemofilia esporádica puede llegar a ser un tercio de los casos de
hemofilia totales y son debido a una mutación genética de la madre o del niño.
Numerosas madres han asegurado tener hijos sanos, recibiendo el
diagnóstico de hemofilia, luego de que sus hijos han presentado frecuentes
hematomas o hemorragias frente a las cuales no se les daba una respuesta medica
clara.
Algunos niños son diagnosticados recién a los tres o cuatro años de edad,
debiendo pasar él y su madre por la angustia que provoca la incertidumbre de no
saber que genera esta alteración corporal.
Notas
Tesis (Magíster en Psicología Clínica)
Palabras clave
Madre e Hijo, Investigaciones, Chile