Nuestra investigación se basa en que el Derecho de Familia, específicamente el chileno, debe ser planteado como una rama autónoma y distinta. Como así lo han hecho distintos países de Latinoamérica, utilizando diferentes métodos, en especial una organización específica y ordenada en un solo cuerpo legal. Que lejos de ser una moda sin fundamentos, defienden una postura que deja manifiesto, la importancia de fondo que tiene la codificación hasta hoy en día.
Es contradictorio que aun en nuestro país, la normativa familiar se encuentre dispersa entre un cuerpo legal y varias leyes. Revelando, que no existe una unión de criterios y principios normativos, que se condigan con esta especial rama, como sí lo lograría un Código de Familia.
En base a esto, buscamos la opinión de algunos profesores de derecho, especializado en la materia, con el objetivo de poder deslumbrar si nuestra hipótesis planteada tiene cabida o no en Chile.
